El Guión

El guión, entendido como el elemento inicial del que partimos para iniciar nuestra narración audiovisual, es una herramienta fundamental en nuestro proceso de trabajo a la hora de crear una historia desde la perspectiva de un trabajo audiovisual comunitario.

Van a ser los participantes los que reflexionen sobre qué historia quieren narrar, qué quieren contar, cuál es el tema que quieren abordar, qué personajes desean que se conviertan en los protagonistas de su historia. Es decir, sobre qué aspectos quieren concretar su mirada, donde van a poner el eje sobre el que elaborar un discurso que transcienda de la mirada individual y se convierta en una reflexión colectiva de toda la comunidad. Que sirva como elemento de reflexión sobre sus comunidades. Del que pueda surgir un proceso de transformación social de su realidad comunitaria. Que nos sirva como reflexión para acometer un cambio personal y grupal de nuestras actitudes, motivaciones y deseos.
 
Para lograr estos objetivos diferentes organizaciones participantes en el encuentro nos mostraron diferentes metodologías para, teniendo en cuenta todo lo anterior, iniciar la tarea de elaborar un guión que sirva de partida para nuestra película. Las reflexiones que vienen a continuación son fruto de la experiencia desarrollada por las diferentes organizaciones. 


COLECTIVO MEJODA.


Escribir a través de la experiencia

  • En primer lugar buscamos que cada participante piense y escriba, de manera individual, varias experiencias que le hayan marcado su vida, que recuerden especialmente, que les resulten placenteras. Este recuerdo se puede plasmar en una frase o una pequeña narración.

  • Después, ya con todo el grupo, se socializa la experiencia de cada uno de los participantes, leyendo lo que han escrito.

  • Analizamos cada una de estas experiencias, compartiéndolas y socializando con el resto del grupo. Aquí ya se produce una retroalimentación con el resto de los participantes porque estas experiencias, en principio individuales, crecen mediante la reflexión colectiva, pues se le van sumando nuevas experiencias que surgen en le grupo a partir de la experiencia inicial. O porque nos damos cuenta que muchas de estas experiencias son compartidas, es decir, que forman parte de bagaje de muchos de los participantes.

  • Posteriormente, el grupo elige aquella experiencia sobre la que desea profundizar y convertir en un guión. Esta elección se basa en aquellos criterios que le grupo decida: porqué es la que comparte más gente, porque nos gusta, porque refleja una experiencia comunitaria que queremos tratar, etc.

  • Para iniciar la escritura de una manera colectiva podemos utilizar un papel continuo, donde se va a ir escribiendo nuestro guión con las aportaciones de todas las personas que estén participando en el taller.

  • Una posible estructura de nuestra historia que se va a transformar en un guión de acuerdo a cierto códigos narrativos, puede ser:

¿Quién es el/la protagonista/as?
¿Qué está buscando?
¿Qué le pasó?
¿Qué le ocurre al final?

Lo que pretendemos con este modelo de construcción de guiones es identificar, dentro de la comunidad y de aquellas personas que participan en nuestro taller, los diferentes elementos que están aconteciendo dentro de sus estructuras socio comunitarias: problemáticas; valores; personajes y experiencias de vida. Para de este modo convertirlas en una historia que aporte a la comunidad y a los participantes una reflexión que sirva de motor para la transformación y el cambio social.

COLECTIVO PASOLINI EN MEDELLÍN

Reflexionmetodologíca

Lo que se pretende es alterar la mirada de los participantes, analizar las intenciones que cualquier observador siempre tiene. Esta alteración de la mirada se realiza en base a dos elementos:

  • Etnografía: Nos vamos a convertir nuestra mirada en la forma de ver de un científico, un antropólogo. Vamos a ser observadores de nuestros barrios, nuestras comunidades con todos nuestros sentidos: sonidos, olores, tactos, miradas. Podemos escoger, por ejemplo, una calle y hacer un recorrido, escribiendo durante el recorrido marcado, todo lo que hemos visto, olido, tocado, escuchado. También podemos ir haciendo fotografías de aquellos elementos, personas, etc que nos llamen la atención por algún motivo a lo largo de nuestro recorrido.

Otro modelo es la elaboración por parte de los participantes de un álbum familiar fotográfico. Tras este trabajo individual se trata de llevarlo a grupoo y analizarlo de manera colectiva. Aquí vamos  a transcender de lo emocional,  tanto de aquellos sentimientos como de las experiencias que nos evocan las fotografías, para analizar estas como observadores, ver los elementos que tienen las fotografías y obtener una información que transciende de los recuerdos individuales y familiares. Con el objeto de lograr la elaboración de una serie de conclusiones colectivas de carácter social que vamos a utilizar en la elaboración de nuestro guión.


  • Cartografía: Se trata de profundizar en lugares, momentos, personajes que han marcado a los participantes y/o a la comunidad donde estamos trabajando. Para ello vamos a elaborar una serie de cuestiones que os permitan obtener la información que deseamos.

Este proceso etnográfico y cartográfico nos va a permitir también ir definiendo, entre otros elementos, las localizaciones, el territorio donde se desarrolla nuestra historia.

Con este trabajo previo de observación y de análisis de los observado vamos a pasar de los visto a la composición y escritura de nuestro relato audiovisual.

Para ello vamos primero a tener con los participantes un proceso de aprendizaje de la teoría del guión y del lenguaje audiovisual.
Un modo de analizar la construcción de un guión es ver con ellos pequeños cortos para ir analizando la estructura de un guión. Vamos a ir parando la película según va sucediendo las diferentes partes del guión. Un guión  suele dividirse tres actos y tiene dos puntos de giro:

    - El primer acto: el planteamiento (donde se presentan los personajes, su situación dramática y el conflicto al que se enfrentan),
    - El segundo acto: el nudo o confrontación (se desarrolla el conflicto)
    - y el tercer acto: la resolución o desenlace (lleva la historia hacia un final).

            primer acto                             segundo acto                                      tercer acto
            planteamiento                         confrontación                                     desenlace
 ------------------------X--------------------------------X-----------------------X
                                   Primer nudo                                         Segundo nudo                          Final                                   de la trama                                         de la trama
                                                                                   

Los nudos de la trama o puntos de giro, son incidentes, acontecimientos, noticias, situaciones que cambian la dirección de la acción dramática.
Hay muchos nudos en el guión que hacen avanzar la acción, pero hay dos nudos principales que estructuran el argumento: el primer nudo de la trama y el segundo nudo de la trama.
El primer nudo de la trama, situado al final del primer acto, es un incidente, acontecimiento, noticia, que genera un nuevo conflicto que se desarrollará a lo largo del segundo acto.
El segundo nudo de la trama encamina la historia hacia el conflicto del tercer acto y el desenlace final. 

ASOCIACIÓN CULTURAL LA CLAQUETA

Apuntes para la escritura de un guión

Lo que pretendemos con este material es contribuir al proceso de escritura de un guión desde una vez ha sido definido el tema y los personajes de nuestra historia. Es decir trasladar la idea que tienen  los participantes del tema que quieren desarrollar a un guión cinematográfico que podamos rodar


El GUIÓN LITERARIO

 “El guión es la historia de la película antes de ser rodada.” José Luis Borau.
“No está escrito para ser leído, sino para ser visto.” Graham Greene.

El guión es el relato escrito de lo que va a suceder en la película y el punto de partida para comenzar cualquier proyecto cinematográfico. El guión parte de un punto, sin dar información sobre los procesos acaecidos con anterioridad, y se constituye como un trayecto que avanza por medio de acciones y conflictos de los personajes hasta llegar a otro punto que se determina como final.

El guión tiene un lenguaje propio, al igual que la novela posee un lenguaje diferente de la poesía o el teatro. Frente a los géneros literarios citados, el guión posee una particularidad específica que va a determinar el tipo de lenguaje que lo acompaña: no está escrito para ser leído, sino para ser visto; es decir, las palabras en un guión sirven para describir las imágenes que luego se van a transformar en la película.


Respecto al lenguaje a emplear:

-          Todo lo que escribimos debe ser “rodable”, es decir, deben ser acciones. Una acción es algo que un personaje hace: andar, comer, llorar, mirar por una ventana, etc. Los pensamientos y los  sentimientos no se pueden rodar, tenemos que buscar las acciones con las que contar esos pensamientos o emociones.

-          Claridad expositiva: frases breves y construcciones sintácticas simples. En el guión no se trabaja con palabras sino con las imágenes que generan las palabras.

-          La redacción del texto debe realizarse en presente de indicativo, ya que podemos rodar sólo lo que está sucediendo en este momento.  

-          La voz en off debe indicarse en mayúsculas: NOMBRE (OFF):

-          Las descripciones de los espacios y de los personajes deben ser breves y claras, es decir, han de ceñirse a lo que posteriormente veremos y oiremos en pantalla. Todo lo que se describa deberá tener una traducción visual.

-          En general, hay que tener muy presente la ECONOMÍA del discurso audiovisual: no conviene extenderse más de lo necesario. El lector de nuestro guión literario debe hacerse una idea lo más clara posible de la historia que proponemos.



LA ESTRUCTURA DEL GUIÓN: EL CONFLICTO


Un modelo clásico de guión es aquel que narra una historia estructurada en torno a un conflicto y a la evolución del personaje principal, cuya construcción pasa por tres etapas: el planteamiento, el nudo y el desenlace.

El primer acto o planteamiento: el guionista sitúa al espectador. Tiene que hacerle entender de qué trata la historia, quién la protagoniza y cuál es su premisa dramática.

El segundo acto o nudo: se centra en el conflicto. Las historias no se cuentan pasando directamente del planteamiento al desenlace, hay que crear un nudo o conflicto, una serie de peripecias que compliquen la acción principal y la hagan interesante. El guionista escribirá un buen segundo acto en la medida en que la acción dramática parezca inalcanzable.

El tercer acto o resolución: el final debe completar y explicar la historia para dotarla de unidad. El clímax es el suceso más importante de la trama. El conflicto se resuelve en el momento de mayor intensidad emocional del guión. Cuando el guionista no nos ofrece una resolución del conflicto, entonces nos encontramos ante un final abierto.

Escribir una historia en torno a un conflicto significa que nuestro personaje principal tiene una meta, un objetivo a alcanzar pero un acontecimiento o un obstáculo desviarán al personaje de su camino para llegar a su objetivo. Cuanto más concreto es este objetivo, más precisas son las situaciones planteadas: lograr atracar un banco, convertirse en estrella de cine, casarse con el príncipe. Los deseos o motivaciones serán revelados a través de sus acciones, visibles en la pantalla, y por lo que se trasluce de su carácter y de sus intenciones en los diálogos.

Podemos hablar de que existen tres tipos de conflictos:

El interconflicto. Para que el protagonista alcance sus objetivos deberá enfrentarse previamente a otras personas que se oponen a él. Puede ser una oposición física, como ocurre en el cine de acción, o una oposición moral, como ocurre en los dramas.

El intraconflicto. Lo que impide al protagonista alcanzar sus metas es él mismo, sus dudas, sus miedos, sus esperanzas, etc.

El conflicto externo. Las dificultades vienen desde un factor externo, ya sea natural, divino o readicionado  con el destino.
                           
LOS PERSONAJES

Al igual que el conflicto los personajes son los motores que mueven el guión. Algunos guionistas escriben a partir del personaje; otros a partir de una situación, de un conflicto.

El creador-guionista debe conocer a sus personajes para que no sean simples estereotipos. Hay que definirlos de forma precisa, para que sean originales, personales.

Algunos cineastas elaboran fichas biográficas sobre cada uno de los protagonistas, aunque sólo utilicen una parte pequeña de esa biografía. Estas fichas son de gran ayuda para poder conocer a nuestros personajes, para saber cómo van a reaccionar ante cada situación que se plantee en la historia y ante otros personajes. Debemos conocer cuál es su necesidad, qué quiere, qué le impulsa, cuál es su actitud, su carácter, cómo es físicamente y si experimenta algún cambio en el transcurso del guión. Conocer de esta manera a nuestros personajes también nos ayudará a escribir sus diálogos.

Un personaje puede tener contradicciones, puede decir una cosa y actuar de otra forma. El personaje no es el mismo al principio que al final de la película. Se habla de que el personaje tiene un recorrido, una trayectoria a lo largo de la historia. Lo que hace evolucionar al personaje no es la intriga, sino la manera en que él vive los acontecimientos exteriores.

La principal dificultad de la escritura cinematográfica es traducir en imágenes, es decir, en acciones, lo que mueve a los personajes. Esta dificultad requiere del guionista una gran capacidad de imaginación para encontrar situaciones que revelarán el personaje al espectador. En muchas ocasiones se recurre a una voz en off que cuenta qué piensa o siente el personaje, pero no conviene abusar de esta herramienta narrativa.

EL GUIÓN PASO A PASO

Para escribir un buen guión, hace falta seguir un orden, un proceso. Es como subir una escalera peldaño a peldaño. A continuación vamos a ir explicando los pasos que se pueden dar a la hora de enfrentarse a la escritura de un guión, teniendo en cuenta que esto no es una receta única.

LA IDEA

Una idea es un argumento dramático completo que sintetiza planteamiento, nudo y desenlace en un párrafo. La idea irá complicándose a medida que el guión atraviese las fases de desarrollo. Nadie puede afirmar que tiene una idea si no es capaz de responder a estas preguntas: ¿Quién es el protagonista? ¿Qué busca? ¿Qué problemas encuentra en su búsqueda? ¿Cómo termina la historia?

Sería una idea: 
Un chico atraca un banco y le detiene la policía; o un chico y una chica se enamoran y se van a vivir juntos, pero a él no le dejan sus padres, etc.

No sería una idea:

A finales del siglo XVIII, un policía de Nueva York es enviado a un pequeño pueblo para investigar la leyenda de un jinete sin cabeza.

EL TEMA

Nace de la lectura profunda de la obra. Responde a la pregunta: ¿qué ha querido mostrarnos el autor/a con la historia?. Casi siempre albergan contenidos filosóficos o morales o antropológicos. Podrían ser temas: la envidia, el amor, el arrepentimiento, etc.

Sinopsis o Story Line

Es un  resumen muy corto de nuestra historia: debe ocupar como máximo cinco líneas. Debe definir los cuatro puntos de la estructura: cómo y dónde sucede el principio, el primer nudo de la trama, el segundo nudo y el final.

LA TRAMA

La trama es el argumento completo, sería como el cuento de la película. Los personajes desarrollan sus acciones según el esquema planteamiento-nudo-desenlace y hacen avanzar la acción. Una trama maestra guía o inspira la narración de un relato concreto.
Algunos ejemplos de tramas muy recurrentes en el cine serían:

- Aventura: El énfasis recae en el viaje mismo y no en el protagonista.
- Persecución: El protagonista persigue o es perseguido.
- Rescate: El protagonista trata de salvar a alguien o a algo. 
- Venganza: El protagonista busca vengarse de algún acontecimiento injusto.
- Rivalidad: Dos personajes persiguen un mismo objetivo.
- Desvalido: El más débil de la competición vence gracias a su superioridad moral.
- Amor prohibido: El conflicto amoroso provoca la ruptura de una regla social, cultural o moral.

Una película ofrece varios relatos dentro del mismo argumento. Como mínimo tres: la historia del protagonista (trama clásica que impone su estructura a todo el guión), la historia de las relaciones que mantienen los personajes (subtramas), y la historia que cuenta la evolución interior de los protagonistas (o arco de transformación).

LA ESCALETA

La escaleta. Es la estructura de la película por secuencias. En la escaleta no se escriben los diálogos, solamente la descripción de la acción principal de cada una de ellas. Y respetando la trama, es decir, contando en el mismo orden en que lo va a recibir el espectador.

EL GUIÓN POR SECUENCIAS

El guión se organiza por secuencias. Una secuencia es una unidad de acción que narra un acontecimiento que sucede en un tiempo y espacio continuos. Las secuencias se componen de un encabezado, una descripción de la acción, los diálogos y las acotaciones. En la descripción de la acción también se pueden dar detalles del decorado, la ambientación y la personalidad de los personajes. Los diálogos deben identificarse claramente, así como los nombres de los personajes que hablan. Por esta razón, se suelen situar en el centro de la página. Las acotaciones pueden informar sobre el estado anímico de los protagonistas y sus acciones mientras dialogan, y se escriben normalmente entre paréntesis.
Cada secuencia es como una ficha o una pieza y debemos trabajar con cada una individualmente.

El encabezado

Sigue este orden:

- La palabra secuencia.
- El número que le corresponda.
- El lugar donde se desarrolla la acción.
- Si es interior (bajo techo) o exterior (al aire libre).
- Qué momento del día es: día, tarde o noche.

Ejemplo de una secuencia

SECUENCIA 1. AULA INSTITUTO. INTERIOR. DÍA

(Descripción)

Finales de agosto en Madrid. Hace calor. Estamos en una típica aula de instituto. Apenas hay unos cinco o seis estudiantes de segundo de bachillerato, alejados los unos de los otros parar evitar que se copien. El profesor reparte los exámenes boca abajo mientras da las instrucciones pertinentes.

(Diálogos)
          PROFESOR (serio):
Hasta que no os diga no le deis la vuelta. Poned todos los libros y carpetas en el suelo. No quiero ver nada en los pupitres, sólo el examen y un boli. Tenéis cinco minutos para leerlo y preguntar cualquier duda que tengáis, cinco minutos. Luego no voy a contestar nada.


La práctica del guión

Durante nuestra práctica con niñas/os y jóvenes en procesos de escritura de guiones hemos ido constatando cómo algunas de las ideas que exponemos a continuación pueden hacer fluir la imaginación con mayor facilidad a la hora de enfrentarnos a una hoja en blanco.

  • Empujar a la creatividad

La escritura de un guión, y de cualquier relato, no siempre surge de manera espontánea. En ocasiones es necesario dar ciertos empujones a nuestra imaginación. Acotar y poner límites a veces puede ser un elemento favorecedor de la creatividad.

Entre las lecturas favoritas de La Claqueta se encuentra un libro titulado “La gramática de la fantasía”, de Gianni Rodari. De esta lectura hemos extraído algunas ideas para trabajar la fantasía en la creación de historias. En lugar de empezar con un papel en blanco, ofrecer a las niñas/os y jóvenes ciertas premisas de partida que van a despertar su imaginación y a posibilitar una escritura más fluida. Algunas de estas premisas de partida podrían ser:

- Varios lugares donde suceda una historia. Por ejemplo: inventar una historia  que suceda en una selva, un aeropuerto y una gran ciudad.
- Varios de los personajes de la historia. Por ejemplo. Un viejo mafioso y una mujer muda.
- Uno o varios objetos. Ejemplo: una caja en un parque.
- Ofrecer el comienzo de la historia.
- Y, ¿por qué no?, ofrecer el final de la historia.

  • Buscar ideas cercanas a nuestra propia realidad

Muchas veces nos empeñamos en crear historias muy complejas que se alejan demasiado de nuestra realidad. Esto es algo que les sucede con mucha frecuencia a los niños/as y jóvenes al escribir guiones para luego hacer un corto. Inventan historias sobre realidades fantásticas que luego difícilmente pueden ser rodadas con los medios de los que disponemos.  O quieren hacer guiones sobre realidades tan alejadas de las suyas que es muy difícil que resulten historias creíbles. Un adolescente siempre será capaz de escribir un guión mucho más interesante si habla de lo que conoce, que, por ejemplo si escribe la historia de un matrimonio en crisis tras la marcha del hogar de los hijos.

  • Biografías de los personajes

Para ayudarnos con la invención de los personajes protagonistas de nuestro guión, nos ha resultado muy interesante partir de unas fichas de biografía sobre las que el alumnado pueda comenzar a trabajar. Estas fichas deberán pedir, al menos, los rasgos físicos de los personajes, sus características de personalidad, su carácter y temperamento, sus deseos, sus miedos y sus objetivos en la historia.
Hay que definirlos de forma precisa, para que sean originales, personales.
Luego es probable que no utilices toda esa información escrita sobre los personajes pero será como la punta de un iceberg, los/as espectadores sólo verán la punta pero intuirán la riqueza que hay debajo.
Este trabajo nos va a ayudar para que sepamos cómo van a reaccionar ante las diversas situaciones en las que les va colocando la historia. Por ejemplo, si sabemos que nuestro personaje es muy hipocondríaco y miedoso será más fácil crear las acciones y reacciones que va a tener si en nuestro guión tiene que ir a un hospital.

  • Trabajar el guión con fichas

Ya hemos visto que las características propias de escritura de un guión hacen que la acción esté dividida en secuencias, cada una de ellas con una entidad propia, en la que se desarrolla una acción concreta que sucede en un mismo lugar o tiempo. Enfrentarnos a la escritura del guión desde un primer momento incluyendo los diálogos puede resultar muy arduo. Nuestra propuesta para simplificar esta escritura es ir de menos a más, es decir, escribir primero unas fichas que correspondan a la descripción de la acción que sucede en cada secuencia.

Con estas fichas podemos jugar también a cambiar el orden de los acontecimientos para así dar con la historia que más se ajuste a lo que queremos contar.
Una vez decidido el orden desarrollamos cada una de las fichas de acuerdo con las normas de escritura del guión, es decir, ponemos su encabezado, el desarrollo de la acción y los diálogos de los personajes con sus acotaciones.


Ejemplo:

Ficha 1
Ficha 2
Ficha 3
En la plaza del pueblo hay un grupo de personas charlando animadamente.
Por la carretera que sube al pueblo llega un coche cargado hasta arriba de bultos. El coche lo conduce una extravagante mujer.
Sentadas en la puerta de una casa dos mujeres esperan impacientes la llegada de Manuela

El orden de esta historia podría ser el de las fichas o también tendrían sentido las siguientes combinaciones: ficha 2 – ficha 1 – ficha 3  o  ficha 3 – ficha 2 – ficha1.
Una vez decidido el orden en el que se sucede la historia, desarrollamos cada ficha como una secuencia.

Sec 1. Plaza del pueblo. Ext/día

Un pequeño corro de hombres y mujeres de mediana edad están sentados en la plaza.

María (riendo)
¡Menudo susto te llevaste ayer!, ¿eh?

Juan
¡Madre mía! Creía que no salía de la acequia.

Enrique (sarcástico)
Si es que ya no estás para andar tu solo por ahí.

Sec 2. Carretera pueblo. Ext/día

Por la carretera que sube al pueblo llega un coche medio destartalado, cargado hasta arriba de bultos.

El coche lo conduce una extravagante mujer con el pelo despeinado y fumando en pipa.

Sec 3. Puerta casa. Ext/día

Encarna (preocupada)
¿Y cómo vendrá esta vez?

Juana
No sé, hija, vete preparando para cualquier cosa, ya sabes cómo es ésta.
Encarna
Ay, señor, si es que una no gana para disgustos.


  • Trabajo con los diálogos

Una de las grandes dificultades del guión es la escritura de unos buenos diálogos.
Como ya hemos comentado, cuanto más conozcamos a nuestros personajes más fácil será escribir lo que van a decir. Un pequeño truco que nos puede ayudar es leer los diálogos que escribamos en voz alta a nuestros compañeros/as, familia, etc. De esta manera apreciaremos más fácilmente si son diálogos naturales o artificiales.

Precisamente esta dificultad a la hora de escribir diálogos, que no resulten demasiado artificiales o complejos a la hora de interpretarlos, nos ha hecho plantearnos otras posibilidades. Las niñas/os o jóvenes con los que trabajamos,

a la hora de enfrentarse a la escritura del guión, encuentran serias dificultades tanto para escribir unos buenos diálogos como para memorizarlos e interpretarlos. En estos casos nos ha resultado de gran ayuda trabajar los diálogos desde la improvisación y no desde su escritura previa. De esta manera trabajamos la comprensión de la esencia de la secuencia, qué sucede y cuál es la reacción de cada uno de los personajes, para desde ahí improvisar una interpretación de la que surjan, de forma natural, unos diálogos durante el propio ensayo. Estos diálogos se van fijando poco a poco a lo largo de los ensayos, permitiendo a nuestro alumnado interpretaciones más frescas y naturales.

  • El tiempo

Todo guión maneja dos coordenadas: el espacio y el tiempo. El espacio son los lugares en los que se desarrolla la acción. El tiempo es el momento en el que sucede la historia: día, noche, durante un año…

Pero también la propia narración tiene un tiempo, un ritmo. Para marcar este tiempo existen diversos recursos:

- La elipsis es un recurso narrativo que supone la supresión de alguna parte de la acción o un salto en el tiempo. Puede ser hacia el pasado, flashback, o hacia el futuro, flashforward.

- La cuenta atrás es un recurso que suele funcionar muy bien y es muy sencillo: hacer que el protagonista tenga que resolver algo en un tiempo determinado, como, por ejemplo, desconectar una bomba.

  • Dosificar la información

Resulta muy interesante jugar con lo que sabe el espectador y lo que sabe el protagonista. Este juego produce lo que conocemos como suspense y sorpresa.

En el suspense el espectador conoce algo que el protagonista no conoce y puede suponer un peligro para él. Un ejemplo muy claro es cuando el espectador ha visto que el protagonista se dirige sin saberlo hacia una trampa.

La sorpresa, en cambio, supone introducir una acción o una información que el espectador no se espera. Suele utilizarse mucho en las películas de terror para asustar al espectador.

Otra forma de jugar con la información es la anticipación. Al público en general le gusta mucho anticiparse a lo que va a suceder en la historia. Podemos ofrecerle pistas falsas que le conduzcan hacia un determinado final, sorprendiéndolo al terminar de una manera que ni se imaginaba. Estas pistas falsas también se pueden dar para generar más suspense a la historia o para conducir hacia una sorpresa que el espectador no haya podido anticipar.

  • El gag repetitivo

Un detalle tanto visual como verbal que se repita varias veces a lo largo de la historia, bien para caracterizar a un personaje o bien para hacer reír al espectador, es un recurso muy recurrente en el cine.